“Silencio Radio”: ¿Por qué hacer periodismo en México es tan riesgoso?
- Dirigida por la realizadora mexicana Juliana Fanjul, este documental reflexiona sobre los obstáculos y los peligros a los que deben enfrentarse los periodistas en nuestro país
- Se trata de un filme excepcional que invita a defender el derecho a la información y que tiene su premiere mundial en el prestigioso Festival Internacional de Cine de Documental de Ámsterdam
- Silencio Radio retoma el caso de la periodista Carmen Aristegui, quien fue despedida de su programa matutino de radio tras un escándalo mediático que puso en duda el derecho a la libertad de expresión en México
Si se toma en cuenta que, según la UNESCO, México es el segundo país más peligroso para ejercer el periodismo —sólo por debajo de Siria—, se comprenderá por qué el segundo largometraje de la directora mexicana Juliana Fanjul, Silencio Radio (2019), resulta tan necesario.
Para hablar sobre esta problemática, la realizadora comienza su película con el caso del periodista Javier Valdez, quien fue asesinado el 15 de mayo de 2017 en Culiacán, cuando se dirigía a la redacción del semanario Ríodoce, donde trabajaba. En enero pasado, durante el juicio del narcotraficante Joaquín Guzmán Loera en Nueva York, el ex líder del Cártel de Sinaloa, Dámaso López, confesó que Valdez fue acribillado por los hijos de “El Chapo” por haber publicado “entrevistas incómodas”.
El asesinato de Valdez generó una gran indignación en el gremio periodístico y Carmen Aristegui fue una de las que alzó la voz inmediatamente: “Javier era un hombre que, como pocos, logró darles rostro, nombre, apellido y entraña a las víctimas del crimen organizado”, dijo durante una marcha. Dos años antes, había sido censurada y sacada del aire con su programa radiofónico, que se había convertido en un contrapeso importante del gobierno del ex presidente Enrique Peña Nieto y que tenía una audiencia de 18 millones de personas.
Es así que Fanjul se da a la tarea de contar las dificultades a los que se enfrentan los periodistas en México, sin la necesidad de exhibir episodios sangrientos o violentos, sino más bien a través de un retrato profundo de una de las comunicadoras más respetadas de nuestro país.
Producida por la compañía suiza Akka Films y la mexicana Cactus Docs, Silencio Radio muestra en 77 minutos por qué la libertad de expresión es fundamental para una democracia. Al final, el dibujo que hace de Carmen Aristegui se convierte en algo mucho más amplio: en la radiografía de un México resquebrajado en todo su tejido social, y en el que la libertad de expresión no es garantía constitucional, sino simple letra muerta.
Actualmente se lleva a cabo la premiere mundial de Silencio Radio en el Festival Internacional de Cine de Documental de Ámsterdam (IDFA), el mayor encuentro fílmico de cine documental del mundo, con una asistencia promedio de 250 mil personas. Se trata de un festival que “proyecta películas con temas sociales urgentes que acaben por reflejar el espíritu del tiempo en el que se realizan”, según la página web del IDFA. Además, el 23 de noviembre, después de la proyección del documental, Juliana Fanjul y Carmen Aristegui sostendrán un diálogo (Doc Talk), moderado por la periodista boliviana María Campaña Ramia.
No es la primera vez que Juliana Fanjul se adentra en el cine de vocación social. Ya antes lo había hecho con su primer largometraje, Muchachas (2015), en el que narra la compleja realidad de las trabajadoras domésticas en México. De hecho, el elenco no estuvo conformado por actrices, sino por empleadas domésticas reales. Según ella, fue una especie de homenaje a las mujeres que la cuidaron cuando era niña.