Espiral: El Juego Del Miedo Continúa (Spiral: Book of Saw) es la película de crimen y horror estadounidense, posicionándose como la novena entrega de la serie de películas Saw. Está dirigida por Darren Lynn Bousman (Saw II, Saw III, Saw IV).
Sinopsis oficial de la Película
Un veterano de la policía (Samuel L. Jackson), el detective Zeke Banks (Chris Rock) y su compañero novato toman cargo de una espeluznante investigación sobre asesinatos en forma de espiral que recuerdan el espantoso pasado de la ciudad. Atrapado en un misterio cada vez más profundo, Zeke se encuentra en el centro del morboso juego del asesino.
- Director: Darren Lynn Bousman
- Guionistas: Josh Stolberg, Pete Goldfinger
- Productores: Mark Burg, Oren Koules
- Compositor: Charlie Clouser
- Género: crimen, misterio, horror
- Reparto: Morgan David Jones, Samuel L. Jackson, Ali Johnson
- Distribuidora: Corazón Films
- Fecha de estreno: 13 de mayo de 2021
Opinión de la película
Cuando hablamos de Saw, no podemos dirigirnos a esta saga como «una saga de terror cualquiera»; estamos hablando de una de las sagas de terror más importantes de inicios del siglo XXI, una saga que en 2004 impactó por su originalidad y brutalidad, dos componentes que la llevaron directo a la clasificación C. Estas películas plantean una feroz rompecabezas que se ha ido expandiendo a lo largo de los años, la idea que se plantea es simple pero efectiva, el poder «juzgar a los que no respetan la vida» y todo gracias a la mente del ingeniero civil John Kramer alias Jigsaw, encarnado por Tobin Bell.
Gracias al éxito rotundo de esta primera entrega dirigida por el director australiano James Wan (Aquaman, the Conjuring) y su singular marioneta en triciclo: «Billy» hizo que se realizarán siete entregas más expandiendo un terror psicológico y gore como feroz metástasis. Y sabemos que a pesar de que John Kramer ha estado presente en todas las películas hasta la última entrega Jigsaw de 2017, no necesariamente ha sido siempre el villano de esta, más bien siempre fue la mente maestra, ya que Logan Nelson, Amanda Young, Mark Hoffman y Lawrence Gordon han sido sus discípulos o imitadores; algunos mejor que otros y varios con poca o media justificación que con historias diversas y a través de los ojos de distintos directores como Darren Lynn Bousman (Tales of Halloween, 11-11-11), David Hackl (Into the Grizzly Maze, Daughter of the Wolf), Kevin Greutert (Jackals), y los hermanos Michael y Peter Spierig (Undead, Winchester) han logrado mantener la esencia de la saga y eso ya es decir mucho, ya que hablamos de ocho entregas que si no han sido las más taquilleras, han sido de las más esperadas por los fans.
Ahora, llega la novena entrega de la saga, «Espiral: El Juego del Miedo Continúa» o en inglés Spiral: From the Book of Saw con un gran número de seguidores esperándola, que cuatro años después de la última entrega (Jigsaw, 2017) se presenta como una mucho más fresca que revela desde el tráiler que se trata de una historia «más detectivesca» y con una marioneta de cerdo, en lugar de el ya famoso Billy y con ganas de traer a la famosa saga una vez más a los cines. El proyecto se anunció oficialmente en mayo de 2019, con un guión de Josh Stolberg y Pete Goldfinger que juntos escribieron Piraña 3D y Saw VIII, pero ahora con Chris Rock como co-escritor. Su estreno, originalmente estaba programado para mayo 2020, sin embargo se retrasó debido a la pandemia de COVID-19, llegando a cines un año después.
La premisa suena y se ve bastante bien, Spiral, cuenta la historia del detective «irreverente» Ezekiel Banks, mejor conocido como «Zeke» encarnado por el propio Chris Rock que bajo la sombra de su famoso padre policía, Marcus Banks (Samuel L. Jackson) se siente con la obligación de sobresalir. A Zeke se le asigna una inquietante tarea: tener que investigar los asesinatos de colegas, que asemejan a lo que la población de su ciudad tuvo que vivir anteriormente, a los del famoso asesino serial Jigsaw.
Es así que 93 minutos de duración avanzan con fluidez y cuentan una historia convincente y visualmente bien producida; con una banda sonora que dibujan psicológicamente a los personajes y que se ajusta a la acción y momentos de terror de buena manera. La gran ventaja que percibí es que el director Darren Lynn Bousman vuelve a dirigir una entrega de esta franquicia, pues ya había hecho Saw II, Saw III y Saw IV en 2005, 2006 y 2007 respectivamente y lo hace de forma natural, mostrando que aprendió de errores pasados. Llama la atención que el comediante Chris Rock sea el protagonista de esta historia junto a Samuel L. Jackson, que además interpreta a su padre; sin embargo, ya se había comentado que Rock en realidad es un gran fan de la saga, es por eso que formó parte esencial para continuar con el legado de esta franquicia.
Sin miedo al pasado e inconsistencias, se lanzó como continuación directa de las ocho películas anteriores pero con la fuerte intención de revivir Saw, solo que con unos cambios ligeros pero importantes, que dan esa frescura que se necesitaba. Las actuaciones son buenas, Chris Rock se nota comprometido con su papel, Samuel L Jackson no podía dejar de brillar por si solo y un detective William Schenk (Max Minghella) muy convincente. La película conserva los flashbacks, simbolizando la clásica referencia al rompecabezas mental que el espectador de Saw está acostumbrado a descifrar y referencias de a montón a las ya clásicas películas; unos originales aparatos que torturarán a los condenados por su «verdugo», eso sí, no todo es perfecto, a pesar del buen trama, actuaciones decentes, soundtrack intrigante, villano convincente, el largometraje da «un frenón» en su profundidad y no logra despegar de lo ya conocido, manteniéndose y otorgando solo un poco más. Sin embargo y no para que piensen que no la disfrute, me frustra la idea de que pudo ser épica. No porque los motivos de nuestro «villano» sean insuficientes, al contrario, eran muy buenos, se tocaron temas sociales como la brutalidad policial y corrupción, recordando al movimiento Black Lives Matter, pero no se atreve a dar más, incluso falla en su guión y en el factor sorpresa, pues a la mitad de la película ya se puede sospechar quien es que lleva todo este juego del miedo.
Sin embargo, denoto su esfuerzo, su fidelidad a la esencia de la franquicia y derrocha su narrativa en expansión, relevancia, intriga y suspenso. Sin duda, uno de los mejores filmes de terror del año.
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Calificación
100 - 85%
85%
De las mejores películas de terror del año y una gran apuesta para revivir la famosa saga de Saw, que se frena y que por poco pudo ser épica.
