Ingenierías de valor, clave para alcanzar el éxito en cualquier inmobiliario

Aplicar ingenierías de valor ha permitido entregar proyectos ecosustentables, a través del uso materiales que generan un ahorro de agua, energía eléctrica y reducción de gases de efecto invernadero. Cabe recordar que el sector inmobiliario y de bienes raíces producen más del 40% de los gases de efecto invernadero en el mundo.

La aplicación de ingenierías de valor resulta fundamental para lograr ahorros con respecto al presupuesto inicial en muchos proyectos inmobiliarios de diferentes sectores; pero además, contribuye a generar edificaciones que protejan el medio ambiente (green building), gracias al uso de tecnologías verdes y materiales ecosustentables.

En esta premisa coincidieron Projects Managers del área de Administración de Proyectos y Desarrollos de JLL, asegurando que en la actualidad, resulta imprescindible no solo generar proyectos financieramente eficientes, sino también que contribuyan a generar una nueva cultura del cuidado medioambiental.

Cabe destacar que una ingeniería de valor es un método sistemático de evaluación dirigido al análisis de materiales, sistemas y procesos, así como al equipamiento del edificio/proyecto, con el propósito de alcanzar las funciones requeridas en el programa eficientando costos totales para el dueño/cliente. Es decir, inversión inteligente a través de estrategias que generen valor. Estas ingenierías de valor deben ocuparse de la eliminación o modificación de cualquier cosa que añada costo sin contribuir a los requerimientos del programa funcional.

Con respecto a este tema, Arturo Bañuelos, Director Ejecutivo de Proyectos y Desarrollos de JLL México señaló que en ocasiones se tiene la idea errónea de que  se aplican ingenierías de valor al  escoger opciones más económicas para cada solución, pero que no es un asunto tan lineal ni tan simple. “Se trata desde luego de encontrar eficiencia económica, pero pensando de forma integral; es decir, que beneficie al proyecto, al cliente, incluso al medio ambiente, pero sin dejar a un lado la calidad del mismo, pues lo más barato no necesariamente es lo mejor o lo requerido. Desde JLL, buscamos que conforme avanza el proyecto se integren nuevos actores con ideas y visiones innovadoras, siempre priorizando la optimización de elementos”, señaló el directivo de JLL.

Alfredo Escobedo, Project Manager que estuvo el frente del proyecto de construcción y remodelación de la terminal 3 (concluída en 2007 en su primera etapa y posteriormente se hizo un proyecto de ampliación que concluyó en el 2015) y la Terminal 4 (concluída en 2017) del Aeropuerto Internacional de Cancún (ASUR), señaló que gran parte de los resultados obtenidos al aplicar ingenierías de valor se basaron en la experiencia de JLL y del respaldo global con el que cuentan al asumir la responsabilidad de cada proyecto. Indicó, por ejemplo, que en el caso de estas dos terminales aéreas se obtuvieron ahorros al cambiar las especificaciones de los acabados de la fachada interior, de los plafones modulares, de equipos de bombeo, así como la instalación de un sistema de agua salobre en los equipos de aire acondicionado. Todas estas adecuaciones permitieron no solo aumentar la eficiencia de la operación a un menor costo, sino además modernizar las terminales y hacerlas más ecosustentables.

Por su parte, Carlos Arteaga, Project Manager asignado al proyecto de las oficinas para Grupo Modelo en la antigua nave industrial de la empresa, otro de los proyectos más importantes en los que JLL ha estado involucrado en los últimos años, también resaltó algunas de las ventajas de implementar ingenierías de valor. Indicó que el uso de nuevas tecnologías y la digitalización de procesos aplicadas a cada proyecto, resulta fundamental para lograr ahorros significativos, por lo que los Project Managers deben estar en constante actualización y capacitación.

Aseguró que si bien generar ahorros no es una exigencia puntual de los clientes al iniciar el proyecto, JLL busca siempre eficientar recursos, factor que permite obtener resultados en términos de eficiencia financiera, pero nunca en detrimento de la calidad del proyecto, “los ahorros parten de una labor de revisiones para obtener el mejor costo – beneficio, buscando siempre que los proyectos resulten un éxito en todos los factores que inciden en el mismo”.