JLL Nuevas condiciones Globales
Adecuación y adaptación a las nuevas condiciones globales son las tendencias del sector inmobiliario
- Diferentes proyectos del sector Turismo, Industrial, Inmobiliario, Retail y Servicios, han sido impulsados por JLL durante el 2021, con el fin de contribuir a hacer realidad proyectos acordes a las nuevas condiciones globales.
- Durante el 2022, JLL continuará coordinando y gestionando grandes proyectos bajo la perspectiva de consolidar los “proyectos del futuro”, basados en tendencias como la sustentabilidad, inteligencia artificial, digitalización, e- commerce, entre otras tendencias de cada sector.
Proyectos basados en estrategias eco-sustentables, adopción de tecnologías de última generación en edificios, complejos turísticos, oficinas, grandes centros operativos e industriales, digitalización e e-commerce, son algunas de las tendencias globales que tomaron gran fuerza durante este 2021 y que se mantendrán durante el próximo 2022, con el fin de adecuar cada desarrollo inmobiliario y proyecto de construcción a las nuevas condiciones globales. La pandemia ha marcado un antes y un después en todas las facetas del ser humano, y sin duda, el sector inmobiliario, de la construcción y de bienes raíces, no es ni será la excepción.
Así lo consideró Arturo Bañuelos, Director Ejecutivo de Proyectos y Desarrollos de JLL México, quien hizo un balance de los grandes proyectos en los que JLL ha participado en México, y cuáles son las próximas tendencias que se vislumbran para los diferentes sectores. El directivo de JLL México indicó que el 2020 fue el año más duro por el Covid-19, en el cual, por dar un ejemplo, el mercado inmobiliario a nivel mundial cayó alrededor de un 9%. Sin embargo, durante el 2021, se logró una recuperación importante, creciendo casi un 23%. “No cabe duda que el sector inmobiliario ha sido uno de los más impactados por la pandemia, ralentizando su actividad de inversión en todo el mundo, pero el escenario de recuperación también resulta alentador”.
El directivo de JLL aseguró que el escenario durante el 2021, aún en periodo de pandemia, desencadenó la aceleración del proceso de transformación de diversos sectores, migrando hacia construcciones y proyectos en donde existiera una mayor flexibilidad e integración de nuevas tecnologías, sobre todo buscando generar proyectos eco-sustentables.
A continuación, el directivo de JLL citó algunos ejemplos de las modificaciones y tendencias que están surgiendo en algunos sectores, mismas que se consolidarán en 2022, y en las cuales JLL a través de PDS han estado y estarán colaborando:
Centros de distribución (sector industrial)
El crecimiento exponencial que tuvo el comercio electrónico durante el 2020 y 2021, está modificando las tendencias de consumo, por lo que actualmente grandes empresas se encuentran instalando centros de distribución en puntos estratégicos del país, con el fin de eficientar sus procesos de logística y entrega. De acuerdo a datos del Banco de México, durante 2020 y 2021 el monto de compras a través de sitios de comercio electrónico creció un 30%, en comparación con el año anterior inmediato (2019). Este crecimiento se mantendrá constante durante el 2022 por lo que se estima que este modelo de negocio mantendrá esta tendencia en los próximos años.
Hospitality (sector turismo)
La digitalización, las tecnologías emergentes y la realidad aumentada, aplicadas a la industria hotelera y turística en México, estarán transformando completamente la experiencia de viajar. Muchas de estas innovaciones tecnológicas fueron puestas en marcha a raíz de la pandemia Covid-19, y han resultado todo un éxito, por lo que se mantendrán e incluso se espera que de forma acelerada, se incrementen las innovaciones tecnológicas para beneficio de turistas nacionales y extranjeros.
Oficinas y centros de trabajo híbridos (sector inmobiliario)
El reto para el sector de oficinas corporativas es y será el de atraer a los empleados a espacios innovadores que fomenten la creatividad y productividad, pero en un ambiente de trabajo seguro. La oficina seguirá siendo el centro del ecosistema laboral, dedicando los espacios físicos a la socialización, colaboración, reuniones presenciales y gestión de personas, pero adaptadas a espacios con inserciones tecnológicas que se adapten a los nuevos modelos de trabajo como el híbrido y la conectividad flexible.
Edificios verdes y ecosustentables
Es un hecho que la pandemia por Covid-19 ha dejado como aprendizaje la necesidad de que las empresas cumplan con estándares de sustentabilidad cada vez más altos, y por lo tanto, aceleró la incorporación de tecnologías sustentables, el cuidado ambiental y la transición al consumo de energías limpias en los proyectos inmobiliarios.
Vivimos en una época en la que la sustentabilidad y la resiliencia van de la mano, pues de ello dependerá la continuidad de las operaciones de la empresa. Por lo anterior, cada vez son más los proyectos inmobiliarios que han priorizado y reforzados sus mecanismos de protección de la salud y bienestar de los colaboradores.
De ahí surge la necesidad de orientar dichos proyectos hacia programas integrales de energía y sustentabilidad, certificaciones nacionales e internacionales como son LEED, WELL, PCES, entre otras y asesorías que, en conjunto, les permitan regresar un poco a la sociedad y al medio ambiente. Adicionalmente, traen consigo beneficios sociales, ambientales e incluso económicos con los incentivos fiscales.
El directivo de JLL señaló que esta nueva realidad para todos los sectores tendrá que ser asimilada poco a poco, cada empresa a su ritmo y con sus necesidades específicas. “Los ejecutivos de cada empresa deberán idear su propio camino, en función del análisis de necesidades que encuentren de forma interna. Nunca será lo mismo adaptar espacios para una empresa del sector retail, que una especializada en logística, o enfocada al sector industrial. Cada sector tiene sus características particulares”.
Arturo Bañuelos finalizó aseverando que el ser humano está expuesto a factores que los seres humanos no podemos controlar, al menos no totalmente, “creo que la pandemia nos dejó un claro aprendizaje de esta vulnerabilidad que tenemos ante eventos de esta naturaleza. Las empresas y sus colaboradores deberán trabajar codo a codo, para encontrar, de forma conjunta, el mejor camino para sus necesidades particulares y con ello, resurgir ante esta álgida etapa que aún vivimos como humanidad”.