Elvis – Reseña de la película
«Elvis», película biográfica-dramática y musical dirigida por Baz Luhrmann (El gran Gatsby, Australia, Moulin Rouge, Romeo y Julieta de William Shakespeare).
La película llegará a cines el 14 de julio de 2022.
Sinopsis oficial de la Película
De la mano del visionario cineasta nominado al Óscar, Baz Luhrmann, llega “Elvis”, un drama de Warner Bros. Pictures protagonizado por Austin Butler y, el ganador de un Óscar, Tom Hanks. La película explora la vida y la música de Elvis Presley (Butler), vistas a través del prisma de la complicada relación que mantuvo con su enigmático manager, el “Coronel” Tom Parker (Hanks). La historia profundiza en la compleja dinámica entre Presley y Parker —que se extendió durante más de 20 años— desde el ascenso a la fama de Presley hasta la consolidación de su estrellato sin precedentes, con un paisaje cultural en evolución y la pérdida de la inocencia de Estados Unidos como trasfondo.
- Género: Biografía, musica, drama
- Director: Baz Luhrmann
- Escritores: Baz Luhrmann, Sam Bromell, Craig Pearce, Jaremy Doner
- Productores: Gail Berman, Baz Luhrmann, Catherine Martin, Patrick McCormick
- Elenco: Austin Butler, Tom Hanks, Olivia DeJonge, Helen Thomson, Kelvin Harrison Jr.
- Duración: 2h 39min
Si hay algo que todos sabemos es que las biografías musicales son uno de los géneros más confiables y rentables en catalogo de Hollywood. Comercian con el atractivo de cantar, las actuaciones de estrellas llamativas y el reconocimiento de marca del artista. Por lo tanto, no es sorprendente que que alguien como Baz Luhrmann haga una película biográfica a gran escala sobre el ícono musical más grande de todos, el creador del estrellato del rock, Elvis Presley. Sin duda él es la elección perfecta para hacer una película del ícono de la cultura pop.
Desde su inicio hacia el fin de sus días, Elvis Presley había perseguido el cine como loco, pero nunca logro ser un reconocido actor, fue hasta después de su muerte que siendo interpretado por varios actores su leyenda ha sido diseccionada, explorada y mejorada, eso si, siempre con un tratamiento «más serio» y es que quizás los cineastas se han mostrado reticentes a asumir su historia porque la iconografía de Presley intimida de dos maneras: por su poder y por su fragilidad. Todo sobre él ha sido internalizado, refrito, parodiado y remezclado por la cultura popular hasta tal punto que parece imposible mirarlo de nuevo o tomarlo al pie de la letra. Su apariencia de otro mundo y sus gestos excéntricos; sus movimientos, sus poses y su voz, esa voz, con sus ronroneos y gruñidos y aullidos y gritos y murmullos; su vívida juventud y su lamentable e hinchado final. ¿Cómo puedes contar esa historia con algún tipo de estabilidad?
Y ahí es donde Baz Luhrmann entra para adoptar un enfoque diferente de las películas biográficas, uno que se centra en el mito que rodea al icónico cantante, pero con todo el estilo, el glamour y la teatralidad de sus películas anteriores. Y a diferencia de otras historias de Elvis, esta se centra más en el turbio manager del cantante, el coronel Tom Parker, quien no quiere nada más que contarle a la audiencia su verdad sobre Elvis y el papel que tuvo en su vida. El director, que coescribió la película junto con Sam Bromell, Craig Pearce y Jeremy Doner, embellece mucho la vida y la carrera de Elvis, eludiendo entrar a lo más profundo de su humanidad. La película es hermosa de ver y tiene una maravillosa energía eléctrica, especialmente durante las actuaciones de Elvis, pero en ciertos momentos lucha con mantener el mismo entusiasmo con el que comienza.
Lo que es cierto, es que el director no se anda con rodeos para sacarte de la realidad, todo comienza con la fascinante secuencia de apertura de la película a escenas llenas de trucos de cámara, pantallas divididas, superposiciones, múltiples fundidos a negros, lo que sea, todo está ahí. Baz Luhrmann siempre ha sido (y será) un cineasta que prefiere el estilo a la sustancia ya que el pintar el movimiento pélvico de Elvis como un momento angular en su carrera puede ser tan ridículo que para algunos descarrila toda la película, pero la secuencia en la que el Elvis de Butler hace que las mujeres del público chillen incontrolablemente es la reacción perfecta a cómo Butler interpreta a Elvis Presley, por lo cual, si no te gustan los primeros cinco minutos de la película, lo más probable es que tampoco te gusten las próximas dos horas y treinta y cuatro minutos, y si, es una duración algo larga para una película biográfica.
Hablando de la actuaciones, el «villano» de la película, Tom Parker, interpretado por Tom Hanks, con una nariz torcida de bruja y papada de animal globo, es un hombre de carnaval de la vieja escuela, que cree que ha encontrado su mejor espectáculo y a través de sus ojos nos cuenta lo que significa para el y para los demás, la leyenda del cantante y esta es quizá la falla importante de la película, que el protagonismo de la película no se define entre el Coronel Tom Parker y Elvis Presley, y hay que decirlo, la interpretación del actor es ocasionalmente, cómica, pero no porque así se quiera si no porque parece un villano que gira el bigote listo para saltar y aprovechar una situación en un momento dado.
Por su parte, el ícono interpretado por Austin Butler, logra demostrar una personalidad magnética, que permite alucinar con montajes expresionistas y caleidoscópicos. El actor se toma muy en serio su papel, desde sus gestos más sutiles hasta sus movimientos, Butler clava la actuación en general, aunque podría haber sido más efectiva emocionalmente si la película se hubiera expandido en la interioridad del cantante, ese hombre tímido e inseguro que solo podía encontrar el coraje de manera intermitente para dejar que su talento incandescente lo guiara. Pero Luhrmann, tan obsesionado con el escenario como siempre, está más interesado en Presley como intérprete que como sujeto psicológico. Y en el escenario, Butler (quien canta algunos temas él mismo y combina su actuación con grabaciones originales de Elvis en otros lugares) es dinamita: convicción física total y carisma de pararrayos. Fuera de eso, los actores secundarios están en su punto, todos hacen brillar a las dos estrellas, pero ninguno sobresale por sí mismo.
En conclusión, a través de las escenas y montajes inteligentemente editados se cubre gran parte de la vida del cantante, incluidos sus trabajos de actuación a lo largo de la década de 1960, mientras que se da un zoom en temas angulares, como su «especial de Navidad» de 1968 y su residencia en Las Vegas. Así es como la película se jacta de ser un espectáculo deslumbrante y enjoyado, que incluso después de cuando las casi tres horas de duración de la película te deja un subidón de energía, pero su gancho dramático nunca se recupera por completo después de la primera mitad, menguando hacia el final y deseando haber conocido más del humano y no de la estrella.
Lo bueno:
- La actuación de Austin Butler es mágnifica, ya que cautiva, emociona y te hace sentir lo que la audiencia en el cine esta sintiendo.
- Tom Hanks logra un papel diferente a lo que estamos acostumbrados, haciendo posible su objetivo primario, ser odiado pero comprendido, quizás sea un oportunista pero no un villano.
- La música es un deleite, sobre todo cuando se escucha el blues que inspiro al cantante a ser quien debía ser.
Lo malo:
- A pesar de la interpretación de Tom Hanks, todo su maquillaje y prótesis lo lleva a ser muy caricaturesco y en ocasiones, eso le resta peso dramático a su personaje.
- La película le resta profundidad al cantante icónico y en ocasiones, lo encumbra a tal punto que se olvida que también era un ser humano, con virtudes y defectos.
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Calificación
100 - 70%
70%
Elvis es un show lleno de luces, energía y una actuación grande de Austin Butler, pero como en todo show, nunca podrás ver más allá de lo que el creador quiere que veas, aunque tengas ganas de ver más.